martes, 24 de mayo de 2016

Cómo venderse a un precio alto: 2 formas de aumentar tu valor

Nunca bajes tu precio, nunca negocies tu valor, por nada del mundo te vendas barato


Hola a todos, de nuevo es este espacio, con muchas ganas de seguir compartiendo con cada uno de ustedes todo este conocimiento que nos ayuda a mejorar, quiero agradecerles por continuar leyendo el blog y por estar compartiendo estos temas con sus amigos, me lleno de alegría al ver que estamos ayudando a mejorar a otras personas.

Hoy quiero hablar de un tema que martilla constantemente en mi cabeza. 

Y es que cuando me enfrento a decisiones dificiles siempre salta a mi pensamiento una creencia personal que tengo y es la siguiente:

"Nunca bajes tu precio, nunca negocies tu valor, por nada del mundo te vendas barato"

Y esta creencia me ayuda a tomar decisiones díficiles en mi vida.

Hoy deseo plasmar en un corto texto, el cambio tan grande que ha generado en mi esta poderosa creencia. 

Imagínate por un momento en una sala de estar leyendo una revista, levantas la mirada y te das cuenta que a tu alrededor se encuentran 5 personas más, sentadas, todos con caras espectantes. Diriges la vista al fondo de la sala, por medio del vidrio de una oficina puedes ves un hombre con traje y corbata entrevistando a una persona, de pronto te das cuenta que te encuentras en una entrevista laboral para un alto puesto de una importante compañía, y las personas alrededor tuyo están allí por la misma razón.

Ahora imagina que se abre una puerta y un ejecutivo dice tu nombre, tu levantas la mirada y él te invita a pasar. En seguida estás en una entrevista, sentado frente al jefe de recursos humanos de la empresa.
En los primeros momentos de la entrevista estás un poco nervioso, la entrevista sigue y sigue, conforme pasan los minutos te sientes más confiado, más cómodo, hablas más e incluso puedes sentir que ya casi tienes el puesto.
De repente el entrevistador te hace la siguiente pregunta:
"¿Señor(a) (pon aquí tu nombre), si este puesto fuera suyo ahora, por cuanto estaría dispuesto a trabajar, cuál sería su precio?... "
¡Vaya pregunta!

Ahora yo te pregunto, ¿Cuál es tu precio? ¿Cuánto valor crees que posees? ¿Eres valioso o te crees un perdedor, o tal vez eres alguien normal?

La metáfora de la entrevista de trabajo explica muy bien el concepto de valor, en una entrevista de trabajo te van a preguntar cuál es tu precio, y para responder tienes 3 opciones, la primera es cobrar por debajo del mercado, es decir, devaluarte; la segunda es cobrar al precio del mercado, es decir, como cobra la mayoría; y la tercera es cobrar por encima del precio normal del mercado. 

¿Cl escogerías?

Míralo de esta forma, existen personas que hacen lo mismo que tú, trabajan la misma cantidad de tiempo y al final del mes ganan mucho más. ¿Por qué pasa esto?. De manera similar existen personas más exitosas que otras, con más satisfacción, con más posibilidades y oportunidades, que igual trabajan e invierten el tiempo de la misma forma en que tú lo haces, pero con resultados mucho mayores. No te has preguntado por qué pasa esto?.

Muchas personas al leer estas líneas pensarán que es injusto ser tratados como mercancías, sin importar nuestros sentimientos y demás actitudes, la realidad querido lector es que nuestra sociedad es así, de una u otra manera estamos evaluando a los demás en términos del valor que nos aportan y eso no quiere decir que seamos materialistas, más bien utilizamos nuestro juicio para saber qué nos favorece y qué no.

Aclaro, no estoy diciendo que siempre sea así, sólo que en ocasiones lo es.

Napoleon Hill y David Schwartz en sus libros piense y hágase rico y la magia de pensar en grande, respectivamente, coinciden en que asignarnos un valor alto en todas las facetas de nuestra vida es clave para la abundancia, no sólo material sino tambn de personalidad y espiritual.

El valor es un tema subjetivo, abierto a la interpretación de las personas. Por lo que si te asignas un precio y estás consiente de qué lo justificas, no hay quien detenga tu ambición.

Un claro ejemplo es Apple Corp., esta empresa se asignó un valor muy alto en sus inicios, donde los demás se posicionaron con precio bajos, apple se posicionó con precios altos y los justificó, ahora las personas están dispuestas a pagar 2 o 3 veces más el precio de un computador sólo por tener la manzanita en sus pantallas.

Asignarnos un valor alto nos ayuda a ganar más dinero, a no negociar nuestros intereses o personalidad, a ser más felices, a pensar en grande y a soñar muy fuerte. A continuación te doy 2 elementos claves para comenzar a trabajar en un alto valor:


1. Véndete caro y no negocies tu precio


Venderte caro es aspirar alto, ser ambicioso, cobrar más. Una de las leyes de la persuasión que más me gusta utilizar es la ley de la escasez, y la ley de escasez nos dice que tendemos a valorar mucho más las oportunidades que son escasas o que parecen escasas. Al venderte a un precio alto inevitablemente habrán personas que no podrán pagar tu tiempo, es normal, habrá cierta escases entorno a ti.  

Muchas personas al ver esta dinámica tienden a negociar sus aspiraciones, a bajarle a la ambición porque nadie paga lo que cobras. Eso es venderse barato. Eso es ser reemplazable.

Yo digo: " Y si en lugar de pensar en negociar tu precio, comienzas a llegar a un público que si sea puede pagar lo que tu ofreces?", es como Apple, Apple no le vende a las personas con pocos recursos, apple le vende a los que tienen el músculo financiero para adquirir su producto. Punto. Si los demás dicen que el iphone es muy caro, en realidad quieren decir que ellos no poseen el recurso para adquirir un celular de esa gama. Tu no ves a Apple bajando los precios por esa razón, ellos siguen creyendo en lo que son y continúan valorándose mucho, por lo que se convierten en un recurso escaso y en consecuencia en algo valioso.

La forma más simple que existe para venderse caro es no negociar tus aspiraciones, continuamente veo hombres que negocian sus gustos por agradar a una mujer o a sus amigos o a su familia, con regularidad escucho profesionales que estudian 7 años seguidos y salen a trabajar por 300 dólares el mes, con una excusa que dice mas o menos así, "Lo que pasa es que no hay trabajo para tanta gente y tocó", está bien, ante la necesidad tenemos que ajustarnos un poco, pero el problema surge cuando tu visión no va más allá, cuando te acostumbras a que tu precio es bajo porque por el momento te encuentras en una posición de necesidad. Yo mismo me he encontrado en posiciones así y la única opción es cogerte la pelotas y aguantar, teniendo siempre en claro tu verdadero valor


2. Justifica tu precio


El otro punto que complementa al anterior es justificar tu precio. De nada sirve querer venderse a un precio alto si no existen razones para pagar ese precio, y no estoy hablando de cuanto sabes o cuantos títulos tienes, o tus posesiones materiales, eso puede ayudar, pero existen cualidades mucho más valiosas en las que puedes marcar una diferencia, cómo te expresas en público, qué tan bueno eres para manejar un grupo y coordinar tareas, qué tan buen conversador eres, todas son cualidades que dan un plus a tu marca (luego hablaremos más acerca de este concepto).

Justificar tu precio implica una evolución constante entre tu antiguo yo y tu yo mejorado, tu yo 2.0. Supongamos que eres un sistema operativo, continuamente ofreces actualizaciones (Upgrades) de tu sistema operativo a tus amigos, jefes, clientes y pareja, ofreces una versión mejorada para que los demás te experimenten. Imagina si ofrecieras un sistema operativo y no lo actualizaras nunca, sería algo obsoleto en pocos años, y eso es lo que pasa con muchos, se convierten en personas irrelevantes, invisibles.

La invitación es a continar evolucionando, actualizando tu sistema operativo, abrazando la mejora constante con el objetivo de justificar el alto valor que te asignas.


Asignate un valor alto y justificalo!.



Estas dos claves, asignarte un valor alto y jutificarlo, de seguro aumentarán tus niveles de felicidad y satisfacción, sé que muchos de usted muestran estos rasgos e incluso muchos más, por lo que me gustaría que los compartieran en los comentarios para que todos aprendamos, de verdad lo apreciaria mucho. 


Carpe diem seductor,


Hasta la próxima.  

No hay comentarios.:

Publicar un comentario