jueves, 31 de diciembre de 2015

Un herramienta poderosa para crear y cambiar habitos


Creacion de habitos en el nuevo año 

Quiero desearte un feliz término de año, mis más respetuosos deseos para ti y un caluroso abrazo. Que estos sean tiempos de cambio para ti.

Personalmente recuerdo estas fechas con muchas emociones encontradas; por un lado, desde hace años he sentido plenitud y la sensación de que todo va viento en popa; por otro lado, recuerdo aquellos tiempos donde la frustración me invadía, recuerdo aquellas etapas de soledad, de no creer en mí, de no saber qué hacer, de confusión. 

El Diario de Dennis lo desarrolle en parte para brindar orientación a esas personas que se encuentran en esa difícil etapa, como algún día yo lo estuve, confundido y con un sabor a derrota constante.

Al ver en retrospectiva todos esos años, pienso que fueron una especie de prueba mental y física. Es como cuando te enfrentas a tus propios miedos, luchas contra ellos, sientes que no puedes, dudas de ti mismo, comienzas a sentir que poco a poco dominas tu miedo y cuando finalmente los superas, te sientes supremamente orgulloso porque pasaste la prueba, porque en la dificultad creíste que tu futuro iba a ser mejor y eso se cumplió, y te sientes supremamente bien.

Probablemente tu estés en la etapa que yo me encontraba y sencillamente no sabes que hacer, sientes que todo te sale mal. Si estas en estos momentos difíciles no aflojes, no bajes la cabeza, sigue avanzando, sigue creyendo.

Para esta víspera de año nuevo quiero darte un regalo que espero sepas aprovechar.

Me imagino que ya estás pensando en las metas que te vas a proponer para el año nuevo o por lo menos has pensado en ello. Tal vez quieras o estés pensando adquirir nuevos hábitos que te faciliten la vida, ya sea hacer más ejercicio, estudiar más, adelgazar, lo que sea. Probablemente quieres erradicar algunos hábitos odiosos que tienes y que sabes son nocivos para ti. Quizá eres un poco fumador o tomas mucho alcohol, incluso trasnochas en exceso. Hoy quiero mostrarte la forma en que puedes diseñar tus propósitos de manera efectiva.

Crea un hábito y cosecharas un destino
La verdad sea dicha, al proponerse metas, la mayoría de las personas les dura la motivación los primeros 15 días. Podemos notar que a medida que transcurren los días, esas metas que nos propusimos comienzan a verse lejanas. Nuestra motivación empieza a disminuir y rápidamente caemos en los mismos hábitos que tratábamos de cambiar. Hicimos el intento pero en eso se quedó, en un simple intento.
 
La clave para cambiar hábitos está, en que en lugar de eliminar el hábito debemos reemplazarlo por otro. Por ejemplo, si quieres dejar de fumar, lo ideal sería encontrar otro hábito para reemplazar el fumar. En lugar de fumar puedes comenzar a estudiar guitarra, fotografía, leer, no sé lo que sea, lo que te guste. Esto funciona a la manera de un distractor para nuestra mente, consolidando el nuevo hábito y desplazando el viejo. Es como quitarle energía y atención al hábito a cambiar.
 
En el estudio de cómo incorporar o cambiar hábitos de mi vida y con base a mí me experiencia, encontré que casi todo depende de tres factores. Al descubrir estos factores clave, comencé a desarrollar una herramienta que yo mismo utilizo para cambiar hábitos y cumplir metas.

La herramienta se llama AVA y está compuesta por las iniciales de Atención, Voluntad y Anclas. A continuación te detallaré un poco más cada punto:

Atención: La atención es la energía que depositas mental o físicamente en el hábito que quieres cambiar o crear. Esta energía la dirigimos a otros hábitos más saludables.

Por ejemplo, si tienes el hábito de gastar mucho, puedes empezar a adquirir el hábito de ahorrar tu dinero cada vez que tengas ganas de gastarlo. El hábito de ahorrar va a quitarle atención y energía el hábito de gastar.

Voluntad: Es la fuerza interna con la que enfrentas el hábito. Este punto es muy importante que lo domines, constantemente debes motivarte a ti mismo para que tu voluntad sea fuerte. ¿Cómo lo haces?,  Utilizando lo que yo llamo el motivo máximo. Escribir el motivo por el cual quieres cambiar ese hábito dañino, un ¿por qué?, un ¿para qué? y un beneficio cuando lo logres.

Siguiendo con el ejemplo de ahorrar dinero, supongamos que tu motivo máximo es que al evitar gastar en cosas innecesarias vas a poder tener más dinero y menos deudas por lo que eso te reportará un beneficio en tu bolsillo y a tu paz mental. Luego de escribir tu motivo máximo lo debes pegar donde siempre lo veas. Personalmente guardo uno en mi billetera y otro en el espejo del baño. La idea es que ese pequeño papel te recuerde todos los días tu motivo máximo.

Al hablar de voluntad cabe resaltar el papel que tienen las recompensas en nuestros estados motivacionales. Debes estructurar una serie de recompensas que te permitan motivarte aún más.

Supongamos que en el ejemplo que continuamos desarrollando, cada mes que pase sin gastar tu dinero de forma impulsiva, vas a gastar el 20% de lo que has ahorrado en algo que tú desees. Es un ejemplo. Tu más que nadie conoce con qué motivarse pero es fundamental que premies tus avances.

Anclas: La última parte de la herramienta AVA son las anclas. Con anclas me refiero a los mecanismos que metafóricamente lanzas hacia el futuro y que te permiten tener el objetivo en mente. Estas anclas son mentales, son visualizaciones de ti mismo en un futuro en donde te encuentras completamente libre del hábito, o con el que sea tu objetivo. La mente no distingue entre realidad y ficción, por lo que la herramienta AVA aprovecha este pequeño "defecto" de nuestro cerebro para engañarlo. 

Continuando con nuestro ejemplo, debes constantemente imaginarte en la situación que deseas, con mucho dinero ahorrado, sin deudas. Tiene que ser una imagen vivida, que te haga emocionar. No interesa que la imagen duré 30 segundos, estas creando tu futuro. Puede sonar muy esotérico, muy al secreto de Rhonda Byrne pero no tiene nada de etéreo, es ciencia trabajando a nuestro favor. Al no distinguir entre realidad y ficción nuestra mente comienza a ver las oportunidades para crear esa realidad que nos imaginamos y sentimos. Por algo la frase, "nuestra mente crea nuestra realidad" es casi que un cliché.

Imagínate que la creación de un hábito es como escalar una montaña; primero, estableces tu objetivo, que es, el subir al pico (Atención); luego, conforme el ascenso a la montaña inicia, tu estado físico disminuye, tienes qué comer algo  para reponer la energía que vas perdiendo (Voluntad), con el objetivo de que tu cuerpo se mantenga hasta el final (Motivación), siempre teniendo en la mente la hermosa vista que se verá en la cima, el viento frío que acaricia tu rostro (Anclas Mentales).

 

El tiempo establecido para que un hábito adquiera su etapa de hábito es 21 días. Pero lo cierto es que en la vida real, un hábito se crea en 21 días y se destruye en 1 día. Si luego de repetir consistentemente una acción por 21 días crees que ya está, que el hábito se creó por arte de magia, perderás todo tu avance. La etapa crítica en la creación de hábitos son los 5 días después del día 21. Un hábito es algo que tienes que hacer hasta que te salga en automático, hasta que ya te guste hacerlo. El 95% de las personas que llegan a la barrera de los 21 días pierden la concentración y pierden todo el avance. Y aquí va una regla.

Perder el avance = La dificultad para adquirir el hábito se multiplica

Quiero que el camino de construcción de hábitos lo realicemos juntos, y para eso he creado un documento que me gustaría descargues e imprimas. Es el regalo que te tengo para este inicio de año. Es la herramienta AVA, una herramienta supremamente poderosa que espero le saques el máximo provecho. Da click y luego guardar como (Archivo 1 , Archivo 2). El documento sólo lo tienes que llenar con los datos que pide. Déjame saber tus avances en la caja de comentarios, próximamente se viene una serie donde hablaré de otros aspectos importantes en la creación y cumplimiento de meta donde evaluaremos tu progreso.

Tal vez creas que es mucho trabajo, que es muy difícil, pero lo cierto es que si pones de tu parte, si en realidad lo quieres, los resultados se evidenciaran sí o sí. 

Más doloroso es ver pasar otro año sin que tus metas se cumplan.


Carpe diem seductor,


Hasta la próxima!

lunes, 28 de diciembre de 2015

Hombre de alto valor


hombres de alto valor
El hombre valiente no es el que no siente miedo sino el que es capaz de dominarlo.

Hoy quiero hablar de algunas creencias poco acertadas que tenemos en nuestra vida y que nos llevan a disminuir nuestro valor, no sólo con las mujeres sino también con las personas más cercanas a nosotros, amigos, compañeros de trabajo o socios. Y es que muchas veces somos pusilánimes con nosotros mismos, muchas veces no creemos en nuestras propias capacidades y en nuestro criterio para afrontar nuestra propia vida y elegimos lo que otro nos dice, lo que nuestra familia cree que es lo mejor para nosotros o lo que nuestra pareja nos aconseja. El dejar de lado nuestro propio criterio mina nuestra autoestima y el valor que proyectamos hacia los demás, con el tiempo desarrollamos creencias que justifican esa falta de valor. De ahí nacen las excusas.

Tom Cruise un día dijo en una entrevista:

“No soy de los que pide consejo, cuando me enfrento a una decisión difícil , siempre pienso que es lo mejor y con base en ello actúo, no importa que esa decisión no le guste a los demás, es un riesgo que estoy dispuesto a asumir”.

Valor puro mi querido amigo.

Tomar decisiones importantes en nuestra vida es una muestra de carácter que aumenta nuestro valor. En este camino he encontrado que muchas veces cometemos los mismos errores una y otra vez simplemente porque no queremos abrir los ojos, preferimos vivir mirando hacia otro lado y no afrontar nuestro verdadero problema. Y nuestro verdadero problema es que no poseemos la honestidad con nosotros mismos para decirnos las verdades a la cara, tomando el toro por los cuernos y buscando una solución. En todo el tiempo que llevo en este camino muchas han sido las personas que he conocido, personas fascinantes y otras no tanto, en muchas de estas personas he observado este rasgo, esta falta de valor. No quieren tomar decisiones porque les falta el valor de asumir las consecuencias.

El valor es el concepto que tú tienes de ti mismo y dicho concepto lo comunicas de diferentes maneras (incluso inconscientemente) a los demás. Lo comunicas por medio de tu lenguaje corporal, tus palabras y más importante aún, tus creencias y tus acciones. Muchos hombres tienen conceptos muy pobres de sí mismos, cuando se ven al espejo su mirada no es de aceptación sino más bien de resignación. Y aquí no estoy hablando solamente de autoestima, el valor es un concepto global con el que una persona se enfrenta al mundo.

Por qué crees que hay personas que son percibidos como más valiosas que otras?, no es una cuestión de dinero, ni de materialismo (aunque hayan muchas personas interesadas la gran mayoría no son así), aquí la cuestión es del valor que ellos mismos proyectan y del valor que creen tener. La fórmula es muy simple.

Alto Valor = Creer que vales mucho + Actuar como alguien valioso = Mejores y más oportunidades


He visto como las personas se acoplan a las necesidades de otras personas sin importar lo que pase. Son personas que dicen si, a todo, que no les importa sus propias necesidades con tal de que los demás los acepten. Personas así hay en todo lado y de todos los tipos, en el trabajo, en tu universidad, y por ahí en la calle. Este tipo de personas son las victimas perfectas para esas mujeres aprovechadas e interesadas, para esos hombre pseudo alfas que se las montan. Las mujeres son muy astutas y saben cuándo alguien es capaz de negociar su dignidad por un beneficio, sea compañía o sexo. Y eso queridos amigos es lo que pretendo evitar aumentando tu valor.

Por eso es tan importante tener un valor extremadamente alto de ti mismo, porque ese concepto que tienes de ti mismo decidirá lo que vas a obtener de la vida. He identificado una serie de creencias que lejos de ayudarte en la vida lo único que logran es encadenarte al árbol de la mediocridad, son marcos mentales de los que no somos muy conscientes. 

1. Se consideran feos o inadecuados.

La verdad sea dicha, las personas son muy variadas y tú puedes encontrar personas de todo tipo, gordos, flacos, altos, con deformidades, increíblemente bellas, pero lo cierto es que estas personas no eligen como ser (a menos que utilicen cirugía), simplemente la naturaleza los trajo al mundo con estos rasgos y no hay mucho mérito en ello. El punto es que no necesariamente una persona bella es más valiosa que una persona fea, nuestra sociedad nos propone estereotipos de belleza inverosímiles, creando más que insatisfacción, frustración por lo que somos. El seductor es un anárquico y no sigue las leyes preestablecidas, él crea su propio código sin tener que ser lo más loco y sin hacerle daño a nadie. Por eso es que tienes que trabajar en aceptarte tal y como eres porque la mayoría de las personas no lo hacen, aceptarte con tus defectos y tus virtudes, siendo muy honesto contigo mismo y siempre tratando de mejorar aquello con lo que no estas conforme y que está en tus manos mejorar. Por ejemplo si eres un poco delgado, con trabajo duro puedes adquirir un poco más de musculo. La idea es estar orgulloso de ser lo que eres, nunca compararte con nadie y ser consiente de que no eres más ni menos que nadie.

2. Creen que son víctimas de las circunstancias

Las personas que carecen de valor creen que sus destinos están grabados en piedra, no son dueños de su vida, más bien la vida o las circunstancias son sus amos. Uno de los puntos en los que debes trabajar más que cualquier otra cosa es en empoderarte de tu propia existencia, trabajar en tus creencias para modelar tu futuro. No importan las condiciones siempre habrá oportunidades o formas de crear esas oportunidades para lograr lo que queremos. La vida me ha enseñado que con trabajo duro casi cualquier cosa es posible. Proponerte una meta y cumplirla es una de las sensaciones más gratificantes que he experimentado y que quiero que tú comiences a sentir.



3. No son exigentes con ellos mismo ni con los demás

Las personas de escaso valor siempre se conforman con lo primero que le ponen enfrente, son personas promedio, tienen un trabajo promedio, con una mujer promedio, con metas promedio. Cuando elevamos nuestros estándares inevitablemente comenzamos a ser más exigentes con nosotros mismos y al ser más exigentes con nosotros mismo más se eleva nuestro valor. Las personas exigentes con ellos mismos tienen el criterio moral para exigirles a otras personas, no se conforman con lo primero que ven, buscan la mejor opción, son más valorados.

4. Transgreden sus creencias

Cuando posees poco valor tus principios son pocos o nulos, no respetas tus creencias y muchas veces las transgredes o no las cumples. Personalmente pienso que los principios son la base de la personalidad, sin unos fuertes principios eres como una pluma al aire, por otro lado cuando posees principios eres como una flecha. Sabes a dónde vas y las personas lo notan y te siguen.

5. Pesimistas

Generalmente las personas con escaso valor tienen una concepción negativa del mundo, son personas que no creen en la abundancia y que el factor que guía sus vidas es la necesidad. El pesimismo o negativismo es una especie de enfermedad que contagia lo que toca, es casi como una pandemia. Las personas con alto valor siempre están pensando en oportunidades, tienen una visión positiva del mundo y son optimistas. Recuerdo un tiempo en el cual luchaba por mi independencia personal y tenía todo en mi contra, poseía un mal trabajo, estaba sólo y aun así, luchaba por independizarme. En ese entonces mi visión oscilaba entre el abatimiento y el seguir en pie, cada día era una lucha constante y fue mi optimismo, mis ganas de ser grande, mi capacidad para creer en un futuro mejor, en que era posible hacer lo que me propusiera lo que me llevo a lograr mi meta. Y es precisamente eso lo que quiero que poseas, creencia en que tu futuro puede ser mejor, en que la vida está llena de oportunidades si sales a buscarlas.

6. Miedo a los riesgos

Tener miedo es algo totalmente natural, el miedo es un mecanismo de defensa que nos aleja de los peligros y las fatalidades, lo que no es natural es paralizarse por miedos que no significan un peligro para nuestra vida, como lo es ir a hablarle a esa desconocida que tanto te gustó o contactar ese socio que tanto te puede ayudar. Las personas de escaso valor se paralizan frente a los riesgos que conllevan enfrentarse a nuestros miedos, ya sean miedos a fracaso, miedo a ser rechazado o lo que sea. Las personas de alto valor saben que el asumir riesgos es parte fundamental de la vida y que si no arriesgas tu posición jamás podrás obtener lo que quieres, es algo así como salir constantemente de tu zona de confort. Yo tengo una máxima que dice: La acción cura el miedo. Cada vez que siento miedo en una situación me lanzo de cabeza y como por arte de magia el miedo se va.

7. Dependencia

Dependencia en todos los sentidos, dependencia emocional y financiera son las principales causas de nuestras malas conductas y nuestro escaso valor. Cuando dependemos de alguien más para lo que sea, inevitablemente algún día nos fallaran, porque somos seres humanos y nos equivocamos, por lo tanto lo más inteligente es independizarnos, luchar por nuestra libertad. Obviamente ser libre es mucho más difícil que ser esclavo, ser independiente es sin duda más retador que depender, pero es precisamente eso lo que permite que nuestro valor aumente.


El punto clave para crear un valor grande en tu vida es la honestidad que tienes contigo mismo, debes saber que muchas veces nos protegemos con excusas para no aceptar que en realidad nos falta mejorar algunas cosas, trabajar en ti inevitablemente te traerá grandes beneficios, aumentar tu valor te ayudará a venderte mejor, a conseguir lo que quieres y a no conformarte con lo que te tocó.

Jamás aceptes algo que no quieres, si es así, que sea momentáneamente, que tus sueños y tu realidad sea la misma, que tu vida sea la que tú quieres y no la que te toca.

Con este regalo me despido ;) 




Carpe diem seductor!


Hasta la próxima!